domingo, 9 de diciembre de 2007

Me tenés HARTA. Lo único que sabés hacer es gritar y mandonear, y todo mientras estás muy cómodo y sentadito. Gritos y más gritos. Ridículo, tengo 2 ojos, 2 piernas, 2 brazos y manos, y por cierto, un cerebro; no hace una puta falta que intentes imponer tu moribundo poder paternal. No necesito tus estúpidas indicaciones.
Te encanta descargar la impotencia de tu vejez en toda persona que se te cruza, por supuesto de la familia, porque afuera hay que guardar las apariencias, no?
No entendés, que lo que digas ya no tiene importancia para nadie en esta casa, y sabés por qué? Porque te lo ganaste a fuerza de estupidez.
Y claro, porque aparte, lo que no entendés, lo que no podés controlar; lo agarrás a trompadas, como un típico neandertal.
Date cuenta que todo el mundo acá adentro te ignora, porque estamos cansados de tus estupideces de machito. Porque encima sos machista; pero no pienses que lo voy a tolerar, lo detesto, jamás voy a permitir que me trates como mamá permite que la basurees. Ella se callará toda la mierda para no armar más problemas; pero yo no, yo no soy ella.
Así tenga que recibir tus golpes, el miedo no me guía más, eso era cuando no tenía la capacidad de darme cuenta de las cosas, cuando era mucho más chica, cuando todavía podías controlarme. Me alegra que alguno de nosotros haya logrado desligarse de ese miedo que profesás siempre, él pudo hacer lo que los demás no pudimos.
Todo lo solucionás con violencia. Ya ni siquiera puedo decir que te respeto, y pienso si realmente alguna vez te tuve respeto en vez de miedo.
El día que estés solo, te vas a dar cuenta toda la basura y porquería que sembraste.
Estás cansado, lo sé, igual que mamá; pero eso ya no te justifica más.

2 comentarios:

Gabriel dijo...

Importa la firma?

No creo, pero leí y tuve bronca, bronca contra mi propio viejo, tan fácil de definirlo con una triple "e".

Egoísta.

Egocéntrico.

Ególatra.

Lo bueno de ésto es que el día de mañana podés no repetir sus errores...

G

Anónimo dijo...

No puedo decir nada, tampoco puedo opinar, simplemente seguir haciendo lo que estoy haciendo. Tratar de acompañar en lo que puedo.
Nunca me gustó hacer el uso de solo palabras, estás se las lleva el viento y es lo que la mayoría siempre hace.
Tampoco puedo dejar ni permitir que una persona que aprecio y me considere dentro de las personas que aprecia, sufra de esa manera.
No me puedo quedar tranquilo, ni me voy a quedar tranquilo. Si hay algo que me molesta es la injusticia.
Perdón si paso por molesto o pesado. Pero por más que estés, tal vez, acostumbrada a estar sola, no te voy a dejar esta vez que sientas que estas sola. Siempre voy a estar recordandote que hay amigos que se preocupan, que hay cosas lindas y buenas, y que no es bueno estar solo.
Mucha suerte Marian, y gracias por bancarme también ^-^