Strange things inside the pockets.

Esto es extraño.

Estaba aburrida y como no había nada en la pc que convenciera a mi aburrimiento de irse, me fui a ver tele.
Como era de esperarse a estas horas de un Domingo (bueno, Lunes...), no había nada de nada que pudiera cumplir el propósito.
Así que volví, total al menos en Inet siempre hay más "canales" para hacer zapping.

Estos hechos intrascendentes pusieron a flor de piel justamente este calificativo: intrascendente. Así que más allá del aburrimiento que no levantó campamento, volví a la pc con la idea de sentir algo importante, algo de todo eso que a uno en la vida le mueve las ideas y que corretea debajo de la piel haciéndonos sentir vivos...
Lo curioso del caso es que los algos alegres se me antojaban un poco insípidos para este propósito, así que buscaba aquel ladrillo imperceptiblemente suelto en la pared, o la tabla disimuladamente floja del piso, esa caja de recuerdos dedicadamente guardada y sellada en algún lugar oscuro y poco frecuentado (como para que el efecto de su contenido fermente densamente, al punto de abofetear sonoramente la cordura de uno al ser descubierto).

Sin embargo un lugar que yo bien conozco para eso no me sirvió al estar falto de vida reciente.
Pero muy para mi sorpresa, un espacio que no había buscado más que por curiosidad y conocimiento de alguien muy querido, de repente hablaba un idioma nacido de la terrenalidad pero en el que ciertas palabras parecían sacadas del Diccionario de mi Fuero Interno o pensamientos como si fueran robados de la Sra.Insanidad que habita mis neuronas.
Sobre todo una pregunta reptó con más fuerza hasta llegar a convertirse en eco en mi cabeza. Una pregunta que encierra una certeza guardada, propia de mi locura, de la que ya varias veces he dejado constancia en este blog.

Me resultó muy curioso cómo todo lo que existe siempre guarda ases en sus mangas, ases que no pertenecen a un juego sino a una ilusión muy ligada a lo real como para no serlo.

Y ahora, más que aburrimiento o necesidad de terremotos, siento unas ávidas ganas de seguir rasqueteando los bolsillos de la vida a ver qué encuentro, déjà vu o no, a ver qué más me depara esta noche extraña.




M.~

[ Speaking out loud. ]